Abogado penalista, apasionado de la Política, del 86, orígenes colombianos, casado y padre de familia, vestido al perfección con trajes hechos a medida, una oratoria elocuente y trabajada, junto con una atractiva sonrisa avalan su perfil de hombre diez. Hablamos de Juan Gonzalo Ospina, fundador del prestigioso bufete Ospina Abogados, especialistas en Derecho Penal y ubicados en pleno barrio de Salamanca.
Licenciado en Derecho por la Universidad Pontificia de Comillas en el año 2010, y un año más tarde en Ciencias Políticas y de la Administraciones Públicas. Juan Gonzalo Ospina cursó el Máster en Derechos Fundamentales por la UNED. “Fueron años de mucho trabajo y mucho esfuerzo, pero merecieron la pena”, así lo recuerda el propio Juango Ospina. Y es que este joven pero preparado abogado penalista tiene un claro interés en poder aportar valor a nuestra comunidad, a España. Preocupado, además, por garantizar y defender los principios de toda sociedad democrática que esté fundamentada en el respeto de los derechos fundamentales, Juango Ospina comienza a hacerse un importante hueco dentro de la alta sociedad madrileña. ¿Sus objetivos? Nos los cuenta el mismo.
¿Cómo es Juan Gonzalo Ospina en su faceta profesional como abogado?
Meticuloso y perfeccionista. No me gusta la improvisación. Los abogados penalistas defendemos la libertad de nuestros clientes, por ello, es fundamental prepararse cada caso como un caso único. Estudiar la aplicación de la ley y contar con el mejor equipo de abogados penalistas para que me puedan ayudar en la búsqueda de una solución jurídica.
Conocemos ya un poco mejor a Juango Ospina profesional, pero ¿cómo es Juango en su día a día?
‘Mañana es tarde’ es mi frase favorita. Me gusta madrugar cuando Madrid todavía duerme; esto es a las 6:00 – 6:30. Deporte, leer las noticias y la prensa y llegar el primero al despacho. Planear la semana y los expedientes jurídicos. Compaginar el despacho con la familia no es fácil, pero hay que saber organizarse, por ello, llegar por la noche a casa y bañar a mi bebé es una actividad inamovible.
¿Qué es para usted el éxito fuera de los juzgados?
El éxito es poder conseguir la felicidad. Y para ello, es importante, estar bien con uno mismo, con tu familia, con tu equipo de trabajo, con tus amigos, relativizar lo que no es importante y concentrarse en lo que sí. Innovar constantemente y adaptarse al cambio. La búsqueda del éxito es el permanente anhelo de todo profesional.
¿Qué es lo que más le estimula de su trabajo?
Defender la verdad. Lo más estimulante para un abogado penalista es poder conseguir hacer bien tu trabajo sin trabas ni zancadillas. Es decir, poder acudir a un juez objetivo e imparcial para que este, a través de sus conocimientos y formación, imparta justicia. La aplicación de la ley, y ser un actor más de la Administración de Justicia dan una sensación de plenitud difícil de explicar.
Además de su trabajo como abogado, también es diputado en la Junta de Gobierno del ICAM, ¿se podría decir que es usted un abogado con alma de político?
Los abogados tenemos alma política porque aplicamos la ley, que es la manifestación de la voluntad popular. Por ello, sabemos las debilidades de la misma, y cuando se podría mejorar. Acudimos a los Tribunales y pedimos justicia. La Abogacía no puede estar ajena a los problemas sociales.
Sin entrar detalles, ¿qué opina Juan Gonzalo Ospina de la situación política actual en nuestro país?
Es compleja y difícil. España vive una coyuntura política que no mira más allá de los próximos 4 años y el mundo global en el que vivimos exige que nuestros dirigentes políticos pudieran mirar más allá: cambio climático, amenaza terrorista, nuevas tecnologías y la revolución digital. El mundo vive una serie de retos que deberían de requerir dirigentes a la altura de los mismos y por desgracia no parece que lo estén.
¿Considera que el éxito personal está ligado al éxito profesional?
Por supuesto. Decía Aristóteles que la virtud está en el equilibrio. Por ello, si somos capaces de compaginar el éxito personal, si estamos felices y en plenitud con nosotros mismos, esto aflorará en nuestro éxito profesional.
Y, ¿cómo prefiere pasar Juango Ospina el día tras un juicio perdido? ¿Solo o acompañado?
No me gusta impregnarme de aspectos emocionales, y tampoco me gusta improvisar. Por ello, cuando preveo que no tenemos razón, es decir que los hechos no son realmente como dice el cliente y que por lo tanto podemos perder el caso, es nuestra obligación desde Ospina Abogados informar al cliente de las posibles consecuencias. De ahí, que cuando se gana o pierde un pleito hemos de tomarlo como una consecuencia de nuestro trabajo ni más ni menos, y seguir adelante con el siguiente.
¿Se ocupa por igual del trabajo que de su vida personal?
Intento que sí. Me gusta empezar temprano, hacer deporte, cuidar la alimentación, leer mucho para instruirme y acudir a distintos foros o coloquios que me aporten valor a largo plazo. Todo lo que sembramos en nuestra vida personal tendrá un resultado en la vida profesional.
¿Cuáles definiría como sus peores y mejores cualidades?
Si empiezo por mis peores cualidades no acabamos… Perfeccionista, hiperactivo, muy perseverante, me gusta tener la razón y he de seguir trabajando constantemente la humildad, la paciencia y la prudencia pues el ímpetu a veces me inunda. De mis cualidades, no sabría definirlas bien, pero me encanta la gente. Empatizo con sus problemas y me encanta escucharlas. Creo que tenemos que hacer el bien, y lo que se hace bien sale bien.
Sus perfiles en redes sociales, tanto el personal -@juangoospina- como el profesional -@ospinaabogados-, son muy activos, ¿cree que las redes sociales son una buena herramienta para crear confianza con sus clientes? ¿O únicamente las utiliza como medio de visibilidad jurídica?
Las redes sociales son un instrumento potentisimo para captar asuntos, vender marca y ofrecer reputación porque somos lo que transmitimos. Por ello, es importante saber qué imagen queremos dar y concentrarnos en ella.
¿Dónde le encontraríamos un sábado cualquiera de descanso?
Posiblemente de descanso con mi bebé y mi mujer. Intento que los fin de semana sean de recuperación, de análisis y de familia. Es necesario cuidar el tiempo que se pasa con nuestros seres queridos que nunca es el suficiente. Por ello, aprovecho si es posible para ir a mi querida Fuenterrabia, en donde me casé, descansar, hacer deporte y volver a Madrid lleno de energía.
Estamos acostumbrados a verle con un estilo de vestir muy formal, elegante y extremadamente cuidado, al detalle. ¿Cuánta importancia tiene la imagen personal para usted?
Mucha. Como he referido anteriormente somos lo que transmitimos. No creo que haya un armario estándar o que haya una forma adecuada de ir vestido. Sin embargo, si creo que hemos de ir acorde con lo que queremos comunicar. Por nuestra clientela, los pequeños detalles importan, y entre ellos está el aseo y la buena presencia.
Cómo es el armario de Juango Ospina.
Variado. Con diferentes modelos, más bien serio e intento que sea elegante. Entre clásico y más bien joven, actual, con la moda pero sin dejarse llevar por ella.
¿Dónde se ve usted profesionalmente dentro de cinco años?
Mi máximo objetivo es ser feliz. En cinco años espero seguir siendo feliz, con mi familia, mis amigos y habiendo hecho un buen trabajo con mis clientes. En cuanto al ámbito profesional, ojalá Ospina Abogados se haya consolidado como un despacho de referencia en el ámbito penal, inclusive a poder ser uno de los mejores despachos penalistas del país.